lunes, 14 de noviembre de 2011

¿Qué sentirán los árboles?

Los árboles en su corteza, quizás, tengan los rostros tallados de aquellos que un día los talaron e hicieron uso de ellos. O tal vez sonrían al ser cortados, y quizás, se llenen de alegría porque les espera una mejor vida. Quizás tengan un cielo y un paraíso donde descansar, y que todo sea viento y lleno de hojas sin marchitar.

Y ese cielo ¿tendrá un lago inmenso?

En ese lago las raíces de los árboles saciarían su sed. Se mantendrían húmedas y no resecas como en este mundo. Tendrían a su disposición el agua, y no esperarían a que un humano o ese ser llamado Dios les permitan beber de ella.

Pensándolo bien, la felicidad les esperaría en aquel mundo, y no en éste donde son maltratados, y tienen que lidiar con ese sentimiento atroz de que sus hojas se marchiten, se deprendan de sus ramas, dejándolos así, vacíos y sin poder dar sombra.

¿Qué sentirán los árboles?